Buenas tardes. Existe, desde la Antigua Roma, un mal uso del término peste para referirse a cualquier epidemia desenfrenada, dando lugar a posibles interpretraciones que asimilen a la Peste Negra en cualquier plaga o epidemia denominada como peste.
Según la leyenda, el origen de este mal mora en una de las campañas orientales de las legiones romanas en el 165 d.C., en la que se profanaría el santuario de Apolo Corneo de la ciudad de Seleúcida (actual Irak), arrancando dicha estatua. Los soldados, registrando el templo, abrieron lo que pensaron que era un cofre, liberando en realidad el germen incurable que gestaron los magos de Seleúcida, asolando desde Persia, la orilla del Rhin y, desde allí, al resto de la Galia, llevando consigo el contagio y la muerte (Amiano Marcelino, XXVIII, 6, 24). Otras fuentes, perdidas o fragmentadas, pero más verosímiles, cuentan que se propagó en el comercio del cereal egipcio. Estas fuentes abordan el origen de la epidemia de viruela que arrasó el imperio de Marco Aurelio (y qué acabó con él mismo) o de "las pestes" de una forma muy general. También caben mencionar epidemias mucho más antiguas, por el segundo milenio a.C., como la plaga de Azoth, padecida por los filisteos y conocida por las plegarias legadas. O los loimoi (epidemias) griegos en la Guerra de Troya (siglo XII a.C.), Apolo, indignado, causa una terrible peste (Homero, Ilíada I 9-10) o la Guerra del Peloponeso (siglo V a.C.), ocasionada por un meteoro (Diodoro XIV, 75) considerada la primera visualización del cometa Halley.
"multaque per populi passim loca prompta viasque languida semanimo cum corpore membra videres horrida paedore et pannis cooperta perire corporis inluv." Lucrecio VI, 1267. Lucrecio nos viene a decir "y multitudes, en todas partes y vías del pueblo, vieras moribundos famélicos con miembros corporales horripilantes, pestilentes y vendados; encamados al perecer del cuerpo".
A día de hoy, se sabe que la concreta Peste Negra (la medieval) la provocó la bacteria Yersinia Pestis y, que la primera aparición de tal, está datada del siglo VI d.C. en el imperio bizantino; dejaría 10 millones de muertes a su paso, una muy reducida cantidad al lado de la incalculable cantidad de bajas que ocasionó la célebre Peste Negra medieval.
La Peste Negra o Black Death, que arrasó Europa y parte de Asia y África, fue causada por una microglaciación que hubo en el 1300, que ocasionaría que muchos rodeadores
abandonaran sus hábitats para llegar a las zonas más pobladas (menos afectadas por el hielo). A partir del 1331, en China, mató a unos 25 millones de
personas; se propagó con facilidad a Asia central, ya que allí solían cazar todo tipo de
roedores, transmisores de la enfermedad a las pulgas, y éstas a las humanos.
Había tres tipos de síntomas que recogía la Peste Negra: bubónica, inflamaciones de los nódulos linfáticos que al romperse emanan un olor insoportable (mortalidad del 65%); pulmonar, infección directa del aparato respiratorio acompañado de tos, ahogo y esputos sanguinolentos (mortalidad del 95%); septicémica, hemorragias cutáneas negras azuladas por todo el cuerpo (mortalidad del 100%). Esta bacteria supone el segundo agente infeccioso que ha causado mayor mortalidad, solo superado por la malaria. Se estima que más de un tercio de la población europea perdió la vida, unos 30
millones de los 80 millones totales. Europa no recuperaría la normalidad demográfica hasta un
siglo después. Además hubo entre 40 y 60 millones de muertos en Asia. Algunos de los potenciadores de esta pandemia fueron:
1- Guerra. El asedio, en 1347, de el infectado ejército mongol a Caffa (enclave genovés) y huida por mar de los genoveses, ya infectados, dirigiéndose a Italia, sur de Francia, Cataluña. Cabe mencionar que el ejército mongol usaba, conscientemente, los cadáveres de sus infectados como munición tóxica para las catapultas.
2- Economía. La actividad en la Ruta de la Seda, manteniendo un contacto permanente entre Asia y Europa; y la pobreza, como causante de movimientos migratorios (mayor contagio).
3- Misticismo. El intelectualismo en las universidades alegaba que la enfermedad la causó una alienación planetaria. La medicina occidental argumentaba que lo originó un terremoto que abrió una grieta de la que emanaban gases del infierno, mientras que la musulmana directamente se oponía a tratar la enfermedad porque era un castigo de Alá para castigar a los infieles. La Iglesia culpó a los judíos de envenenar el aire y el agua; lo que se tradujo en persecución (y huida de éstos) y matanza antisemita, llevándonos a más contagios y más muertes. Esto originó los pogroms. Por si fuera poco, se cree que el papa Gregorio IX, un siglo antes, ordenó el exterminio de los gatos negros, justificando que eran seres infernales, siendo éste un depredador de las ratas (portadoras).
4- Período de incubación. Entre dos semanas y cuarenta días sin manifestar síntomas pero portando la infección.
5- Higiene. La mentalidad medieval nunca supo apuntar hacia este campo.
6- Colapso emocional. Algunos reaccionaron con un extremo deseo de vivir la vida aferrado a los
placeres mundanos, como los goliardos (clérigos y estudiantes que se abandonaron a la
vida pecaminosa y al vicio) o el testimonio que lega el Decamerón; mientras que otros reaccionaron retirándose del mundo para ir a la vida eterna y
expiar sus pecados, bien plasmado en la vida del flagelante. Tambien
surgió el culto a san Roque (un peregrino que dedicó su vida a atender a
enfermos de la Peste Negra). Tanto la vida mundana, como los suicidios, como el auge de procesiones de culto
aumentó el número de contagios y muertes.
"Y así como el final de la alegría suele ser el dolor, las miserias se terminan con el gozo que las sigue." Decamerón.
Solo se dieron cuenta de que era útil el aislamiento, por lo que detenían a los barcos que llegaban durante 40 días, a esto se le llamó cuarentena. Empezaron a usar prácticas funerarias salubres como enterramientos rápidos, fosas comunes y quema de cadáveres; aislamiento de contagiados, o taparse la cara con máscaras. La higiene ascendió inevitablemente y construyeron alcantarillados, respetaron los ríos, etc. Esto provocó una selección natural, ya que sobrevivieron los que tenían
una mayor inmunidad, quienes pasaron dicha inmunidad a la descendencia.
Para 1352 la extensión de la Peste Negra abarcaría prácticamente todo el mapa ecuménico. Lo que nos indica que la letalidad de la Peste Negra no fue por su pico de 1348, sino por su consecución de azotes durante el lustro de 1347-1352 y sus cepas durante los próximos 25 años. No sería erradicada, tras mucho avance en la ciencia, hasta el siglo XIX. Cabe mencionar a Nostradamus como uno de los médicos más célebres que combatió este mal. Se conoce que ha aparecido algún brote pequeño de Yersinia Pestis en los tiempos actuales en África.
La Peste Negra significó el acoso y derribo sobre toda la materia y cultura que se había gestado en la Plena Edad Media.
Fuentes: Ruiz Domínguez, J.A. (2019). La Baja Edad Media ¿Tiempo de Crisis?
Tucídides II, 53, 4
Amiano Marcelino XXVIII, 6, 24
Homero Il, V
https://idus.us.es/bitstream/handle/11441/29230/La%20funcion%20real%20en%20la%20Mitologia%20Tartesica.pdf;jsessionid=F5EDFEBF6E9E95AC1E19A51EB3A5832B?sequence=1 (18/03/2020)
https://idus.us.es/bitstream/handle/11441/29230/La%20funcion%20real%20en%20la%20Mitologia%20Tartesica.pdf;jsessionid=F5EDFEBF6E9E95AC1E19A51EB3A5832B?sequence=1 (18/03/2020)
https://scielo.conicyt.cl/scielo.php?pid=S0716-10182016000200011&script=sci_arttext&tlng=p (18/03/2020)